Hablo para mí.
A veces, aunque parezca increíble, me escucho...
A veces, cuando me escucho, parece imposible pero llego a hacerme caso.
Ven a decirme cosas al oído,
estoy cansada de estos monólogos interminables
de mí para llevarme la contraria, de yo para decirme que no.
Dime tan solo que la calma también termina
y yo añoro tanto la tempestad de tus palabras.
Si cuando me hago caso es para acostarme, ya ves tú...algún día tendré que aprender a imponerme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario