17.6.08

VÉRTIGO

Otra de las situaciones que se repiten en mis sueños es la de estar volando, bueno más bien dando unos saltos muuuuy grandes, dejando bajo mis pies los árboles, casas, edificios... pero no disfruto de ello. No puedo parar, no controlo los saltos y cada vez subo más alto. Sólo puedo preguntarme cómo es posible que antes supiera utilizar esta habilidad y que se me haya olvidado cómo hacerlo. Lo curioso es que el miedo me surge cuando subo, no cuando voy cayendo.

Siempre me ha gustado tener los pies en el suelo.

Pero sigo recordando cómo se llega a las alturas, para cuando llegue el momento.

4 comentarios:

PetitaCriatura dijo...

Las subidas autenticas son las que no entienden de leyes de gravedad ni de miedos. El dia menos pensado, dejas de pensar en los pies y en el suelo.

niña de azucar dijo...

Eso, el día menos pensado ;)
Para las subidas auténticas es para las que sigo recordando cómo se llega a las alturas.

mi corazón selenita dijo...

Si pierdes pie, no te preocupes, estaré por ahí por si te entran tentaciones de saltar demasiado alto o demasiado poco. Es dificil levantar el vuelo pero una vez que lo haces se te olvida cómo se vivia con los pies en la tierra.

Matilde dijo...

Pero y cuando no se sabe aterrizar...alguna vez conocieron a un ángel con miedo *alas* alturas.