9.10.07

ALEATORIO

No eran mis manos las que se aferraban a tu cuello como una soga,
no era mi calma la que te impedía dar un paso más,
no era mi deseo el que encadenaba tus movimientos,
no eran mis sueños los que alimentaban tu soledad.

4 comentarios:

Mul dijo...

Claro que no, cada uno es responsable de lo suyo....

dable dijo...

¿Entonces, qué era?, se pregunta ella.

niña de azucar dijo...

ella misma, eso era

Eyes dijo...

O era tan tu q ni siquiera podias controlarlo?